Un estudio pormenorizado realizado por CC.OO. sobre los Presupuestos de la Junta de Andalucía para 2015, pone de manifiesto que las partidas para gastos de funcionamiento de los centros educativos se reducen de media un 16,96%, alcanzando en los de Infantil y Primaria una reducción de casi el 34% y más de un 37% en los centros de Educación Compensatoria.

Cada curso escolar los centros educativos reciben una partida presupuestaria para gastos de funcionamiento. Estos gastos repercuten en las compras menores que se realizan, especialmente en material escolar no inventariable, en mantenimiento de los edificios (arreglos menores, fontanería, cristalería o pintura), adquisición de material de los departamentos y aulas, incluyendo además, en el caso de los Institutos y centros de otras enseñanzas no obligatorias, como son las Enseñanzas Artísticas, por ejemplo, los gastos ocasionados  por el consumo de electricidad y agua.

Según el secretario general de la Federación de Enseñanza de CC.OO. de Andalucía, José Blanco, “el estudio pormenorizado de los Presupuestos de Andalucía para 2015 vienen a confirmar el recorte presupuestario sobre las raquíticas cuantías para gastos de funcionamiento que reciben los centros educativos, que ya se vieron reducidas en el pasado ejercicio”.

El estudio realizado por CC.OO. sobre los presupuestos andaluces para 2015 constata que la reducción en las cuantías es de un 33,64% para los centros de Infantil y Primaria, un 7,20% para los centros que imparten Secundaria, Bachillerato y Formación Profesional, un 17,90% para los centros específicos de Educación Especial, un 17,90% para los centros de personas adultas, un 11,84% para los de Enseñanzas de Régimen Especial, y un 37,29% para los de Educación Compensatoria.

El sindicato denuncia que al tratarse de una partida fundamental para el día a día, esta reducción --que de media es del 16,96%-- repercutirá negativamente en la organización, funcionamiento y gestión de los centros educativos.

Para José Blanco, “este hecho es fruto de las políticas de recortes y austeridad que están llevando a cabo los Gobiernos de España y Andalucía. En el caso del Gobierno andaluz, su discurso va por distinto camino al que dicta el  presupuesto, que una vez más marca de modo significativo dónde no están sus prioridades”.