• Nuria López: “tenemos una honda preocupación por cómo se está afrontando la tercera ola. La Consejería de Educación no puede trasladar su responsabilidad al conjunto de la comunidad educativa”.

• Diego Molina: “No se ha destinado ni un solo euros para adaptar los centros educativos al cambio climático por lo que reclamamos medidas como filtros HEPA, sensores de CO2 y pasar a formación online donde sea necesario ante el clima y altas tasas de transmisión de la covid”.

La secretaria general de CCOO-A, Nuria López, y el secretario general de la Federación de Enseñanza del sindicato, Diego Molina, han analizado la situación del sistema educativo público andaluz, una vez finalizado el primer trimestre del año y en plena tercera ola de la pandemia.

Los dirigentes han sido muy críticos con la actuación del Gobierno andaluz, al que han acusado de actuar “bajo la improvisación, con una absoluta desorientación y falta de coordinación, compromiso y liderazgo” planteando que, ante la grave situación de la pandemia y las temperaturas del invierno, la actividad lectiva pase a realizarse online con altas tasas de transmisión como ya sucede en numerosos países vecinos con tasas incluso más bajas que muchas zonas andaluzas.”

Asimismo, López Marín ha acusado al consejero de Educación de “esconderse día sí y día también tras la mascarilla, para ocultar las debilidades del sistema educativo”, y le ha afeado que haga declaraciones “sin testar y sin rigor científico”.

Según señala CCOO, “el enorme aumento de los contagios y el frío parece no llegar a las aulas, según el criterio de la Consejería de Educación que improvisa y exhibe una falta de rigor tremendo en la gestión de esta pandemia”.

En lo que respecta a la comunidad educativa, ambos dirigentes han puesto en valor “el sobreesfuerzo que ésta ha realizado y siguen realizando”, y han criticado que el Gobierno andaluz “le traslade al profesorado, equipos directivos y padres y madres, las que son sus responsabilidades”. “Desde CCOO-A defendemos la presencialidad como mejor instrumento contra la desigualdad, pero no se puede descargar esa responsabilidad en los docentes y equipos de dirección como está pasando en Andalucía, por lo que es necesario pasar de modo transitorio, pero también urgente, a la formación online allí donde el frío y las la altas tasas de transmisión lo requieran“. Según ha informado Molina, “no se entiende que en las instrucciones de inicio de curso se haya exigido al profesorado que programe ante una eventual vuelta a la formación online, y que esta no se plantee en estas circunstancias excepcionales, de frío y altos índices de contagio"

Precisamente, López y Molina han coincidido al señalar algunas de las deficiencias más importantes del sistema educativo andaluz; entre ellas la falta de financiación por parte de la Junta de Andalucía que, como ha apostillado Molina, “no ha dedicado ni un solo euro a adaptar los centros al cambio climático ni a facilitar medios tecnológicos a familias con bajos recursos ante una previsible formación online como a la que el actual contexto nos obliga”

Según explican los dirigentes, esta situación se ha visto agravada con la pandemia en esta tercera ola, ya que con las bajas temperaturas “se están dando situaciones insostenibles que han llevado al sindicato a poner numerosas denuncias ante inspección de trabajo sobre la situación de numerosos centros educativos.”.

Sobre esa situación, Molina ha criticado que Educación no respete la ley andaluza de bioclimatización en los centros educativos y no aplique medidas como filtros HEPA y sensores CO2 para facilitar la ventilación en las aulas y evitar que las ventanas tengan que estar abiertas durante toda la jornada. “La Administración no está a la altura de la pandemia y en vez de poner mecanismos para adaptarse a las circunstancias, se pone de perfil, obviando lo incuestionable.”

En lo que respecta a la comunidad educativa, ambos dirigentes han puesto en valor “el sobreesfuerzo que ésta ha realizado y siguen realizando”, y han criticado que el Gobierno andaluz “le traslade al profesorado, equipos directivos y padres y madres, las que son sus responsabilidades”.

Por otra parte, y en relación al profesorado, el sindicato ha dejado claro que trabajará para que los 7.000 profesores que se han incorporado al sistema educativo público gracias al acuerdo del que forma parte CCOO-A, pasen a ser de estructura, una vez acabada la pandemia. “El objetivo es bajar la ratio porque ya ha quedado demostrado que con ello se aumenta la calidad de la enseñanza”.