El sindicato ha presentado los resultados de un estudio que se ha llevado a cabo en más del 50% de los 200 centros educativos andaluces acogidos al modelo experimental de sustituciones del profesorado puesto en marcha por la Consejería de Educación hace cinco meses. El estudio revela que aunque el sistema tiene buenos resultados hay que revisar algunos aspectos del modelo, especialmente, los relacionados con los procedimientos burocráticos para darles mayor agilidad. CCOO ha anunciado que espera reunirse con la Consejería de Educación antes de mediados de mayo “para que el modelo esté implantado en el cien por cien de los centros para el próximo curso”.

El secretario general de la Federación de Enseñanza, José Blanco, y el responsable de Profesorado de Enseñanza Pública de la Federación, Patricio Pérez, han explicado que uno de los problemas que padecen los centros educativos en su día a día es la cobertura de los permisos y bajas del profesorado, incluso en los casos de licencias y permisos planificados y autorizados por la propia administración educativa que, en un gran número de casos, requieren de más de quince días para que se cubran”. Por este motivo, y ante la denuncia reiterada de CC.OO., la Consejería de Educación ha decidido aplicar un modelo experimental en 200 centros educativos andaluces con un procedimiento que permitiese que la cobertura de las bajas se llevase a cabo de un modo más ágil y eficaz.

CC.OO. ha llevado a cabo un estudio después de cinco meses de su puesta en marcha, en más del 50% de los centros en los que se ha implantado el modelo experimental y entre las conclusiones del mismo, destacan algunos datos significativos, entre ellos que la mayoría de los centros (80%) desean continuar con este modelo, pues gracias a él y a la simplificación del proceso, las bajas se están cubriendo en un plazo medio de 3 días, “algo impensable en el resto de los centros educativos en los que este modelo no está instaurado”.
 
No obstante, con el estudio CC.OO. ha detectado que desde los propios centros escolares se reclama una mayor coordinación entre la Consejería de Educación y las propias Delegaciones provinciales, pues se están generando en algunas provincias problemas administrativos y burocráticos que pueden solucionarse con más agilidad por parte de ambas administraciones. En opinión del sindicato, esta agilidad también se puede conseguir dando una información más amplia al inicio del proceso.

Asimismo, del estudio se desvela que hace falta un mayor apoyo administrativo en los centros, ya que en los Institutos de Secundaria que cuentan con auxiliares administrativos se han encontrado con menos dificultades que en los centros de Educación Infantil y Primaria que no cuentan con ningún apoyo, y todo el trabajo ha recaído en los equipos directivos.
 
Otro de los problemas que ha detectado el estudio ha sido el referente a la cobertura de la primera baja, ya que los centros han tenido que utilizar su “cupo de refuerzo” para esta sustitución, con lo que vuelven a tener problemas con el apoyo en Primaria. Además, los centros que no tienen este cupo han tenido que consumir parte del presupuesto dirigido a otro tipo de bajas para el que estaba diseñado el modelo experimental. Los créditos también han tenido que destinarse a cubrir maternidades y licencias planificadas, aunque en la mayoría de las veces no han existido problemas en la ampliación de presupuesto argumentado por estos motivos.
 
Según CC.OO. el presupuesto asignado a cada centro para las coberturas de sus bajas se ha incrementado cuando así ha sido necesario, sin embargo, muchos centros han solicitado un incremento tanto en las jornadas asignadas como en la propia dotación que a veces ha sido insuficiente.

Tras los resultado obtenidos del estudio, el sindicato considera que “es necesario seguir avanzado en este modelo de sustituciones”, y en ese sentido, ha realizado varias propuestas, entre ellas que la dotación de créditos asignados a cada centro sea más flexible, “pues una baja de larga duración puede agotar el presupuesto de un centro en tanto que en otros este no se utiliza en su totalidad”.
 
Otra de las cuestiones en las que CC.OO. ha insistido es en la revisión del catálogo de bajas, ya que, según han declarado Blanco y Pérez, “las de larga duración, las licencias por maternidad/paternidad o por estudio, al igual que todas aquellas planificadas, no deben contabilizar dentro de los créditos y cupos asignados a cada centro ya que no se tratan de bajas imprevistas”. El objetivo es, según han señalado los dirigentes, “facilitar los procesos administrativos, incluida la ampliación de cupos para los centros, que es otro de los aspectos básicos que hay que mejorar.”
 
Ambos responsables han coincidido al apuntar la dificultad que supone para la mayoría de los centros escolares andaluces la cobertura de las bajas del profesorado, “una cuestión de vital importancia si queremos mejorar en calidad educativa y los rendimientos escolares”.

Por ello, el secretario general de la Federación ha informado de que pedirán una reunión a la Consejería de Educación antes de mediados de mayo para que el modelo esté implantado en el cien por cien de los centros escolares públicos andaluces, -con las mejoras propuestas de por CC.OO. -, en el mes de septiembre, coincidiendo con el inicio del próximo curso escolar.