En la mañana del sábado 26 de noviembre unos 2.500 manifestantes han participado en la manifestación convocada por CC.OO. y otros sindicatos contra el Decreto 302/2010. Contra la precariedad laboral del profesorado interino y por la calidad de la enseñanza pública, en la manifestación se ha reivindicado un sistema de ordenación del personal docente interino en el que la experiencia docente sea el criterio prioritario.

La estabilidad y unas condiciones de trabajo dignas para el profesorado interino han sido siempre objetivos prioritarios de la acción sindical de CC.OO. En el momento actual, los logros conseguidos en las últimas décadas (garantía de empleo, estabilidad en el mismo y reglas claras e iguales para todos los integrantes de las bolsas de trabajo) han saltado por los aires tras la publicación del Decreto 302/2010, que ha contado desde el primer día con el rechazo de la mayoría sindical.

La nueva regulación de la ordenación de las bolsas de profesorado interino, así como de las condiciones de acceso y permanencia, han traído la división del colectivo y una inseguridad constante sobre el futuro profesional de todo el profesorado interino.

No hay garantía de estabilidad para nadie en el futuro: el Decreto 302/2010 ha abierto la puerta a que la nota de oposición sea el único factor verdaderamente determinante para poder seguir trabajando. Hoy para los interinos que comenzaron a trabajar a partir del 1 de septiembre de 2010. Mañana, probablemente, para aquellos que empezaron a trabajar con anterioridad a esa fecha.

Con su actuación y sus declaraciones públicas en defensa del mencionado decreto, la Consejería de Educación ha proyectado públicamente una mala imagen del profesorado interino y ha despreciado ante la opinión pública la experiencia y el tiempo de servicio como valor necesario para la mejora de la calidad de la enseñanza pública.

CC.OO. está trabajando para la modificación del Decreto 302/2010 y la vuelta a un escenario de futuro profesional para todos los interinos. Tras meses de concentraciones, recogidas de firmas, encierros y todo tipo de actuaciones, ya es hora de que la voz de todo el colectivo unido se oiga, tal y como ha ocurrido en la manifestación desarrollada en las calles de Sevilla con más de 2.500 participantes.