El atropello que los gobiernos central y autonómico están acometiendo contra los empleados públicos, al dictado de los insaciables intereses de los poderes económicos para salir de la crisis que ellos mismos han creado, está rebasando todos los límites de lo permisible.

Han convertido a los empleados públicos en el centro de los males de la economía, como primera fase para emprender a continuación lo que llaman adelgazamiento de la Administración, que no es otra cosa que el saqueo de los servicios públicos, entregándoles su gestión a la iniciativa privada, que tanto añora los suculentos dividendos que les reportaría.
 
El único camino que nos queda es la firme y constante resistencia a su aceptación y la implicación en todas las acciones y movilizaciones que estamos realizando, así como las iniciativas que podamos organizar en nuestros centros de trabajo. Considerar que la interposición de recursos por sindicatos o a nivel individual nos reportará la solución, es caer  en la más engañosa de las respuestas posibles, a juzgar por los amargos Autos del Tribunal Constitucional 8173/2010, de 7 de junio de 2011 y 179/2011, de 13 de diciembre de 2011, respecto a los recursos que interpusimos, al igual que lo hicieron otros sindicatos, contra los últimos recortes en 2010 del  Gobierno  Zapatero.
 
Aquellos sindicatos que intentan justificarse ante los empleados públicos anunciando en los medios de comunicación la interposición de recursos judiciales, con cánticos de estar defendiendo y protegiendo los intereses de los empleados públicos, están protagonizando el mayor abandono y engaño al colectivo, todo un acto de cinismo porque son conocedores de los recientes pronunciamientos del Tribunal Constitucional.
 
Los servicios jurídicos de CC.OO. están estudiando las escasas posibilidades que existen de interponer recursos contra las agresiones de los gobiernos central y autonómico después de estos Autos del Tribunal Constitucional,  y no cejará en el empeño de la defensa de los trabajadores del sector público por todas las vías posibles, pero con el convencimiento de que lo único que puede parar estas agresiones es la constante explicación a la ciudadanía y la participación decidida en las movilizaciones.  
 
¡Por la defensa de los Servicios Públicos! ¡NO a los recortes!
 
Manifestación: 19 de julio a las 20,30 horas