La administración educativa andaluza ha publicado las Instrucciones de 13 de julio de 2021, relativas a la organización de los centros docentes y a la flexibilización curricular para el curso escolar 2021/22.

En dichas instrucciones reconoce las consecuencias que sobre los sistemas educativos ha tenido la pandemia de COVID 19 declarada en marzo de 2020 y la necesidad de dar rápidas respuestas para garantizar la continuidad de los procesos de enseñanza aprendizaje en un entorno escolar seguro.

A continuación, nos indica “Actualmente nos encontramos en una situación sanitaria distinta a la de hace unos meses, con el estado de alarma finalizado desde el 9 de mayo de 2021 y con la campaña de vacunación avanzando a buen ritmo”. Nos gustaría compartir con ella dichas palabras, pero no nos es posible hacerlo, porque la realidad diaria nos somete a un veredicto diferente.

Lo cierto es que, a día de hoy, los contagios siguen subiendo en nuestra Comunidad Autónoma y en el resto del país. De nuevo muchos territorios se plantean medidas de contención del virus, a pesar de la campaña de vacunación en marcha.

Estamos a mediados de julio y aún queda un largo mes de agosto por delante. Es ahora el momento de planificar y organizar un curso escolar 2021/22 que se vislumbra exactamente igual que el anterior en cuanto a medidas organizativas y sanitarias de los centros educativos, excepto por esa nueva distancia interpersonal segura que recoge el Gobierno de la nación de 1,2m frente al 1,5m del año pasado, escasos 30 cm que marcan por lo visto una diferencia enorme a la hora de prevenir o no un contagio y que mucho nos tememos puede ser utilizado de excusa para recortar la plantilla COVID.

Más allá de esta realidad diferente de partida que ellos aducen, el curso acabó con unas trabajadoras y trabajadores extenuados por el sobre esfuerzo que ha supuesto poder impartir las clases con cierta normalidad. Esfuerzo que solo puede ser reconocido por parte de la Administración dotando a los centros la plantilla necesaria que permita hacer desdobles y bajar las ratios en las aulas.

La ausencia de alusiones en dichas instrucciones, a los refuerzos COVID del profesorado, o bien a las horas de coordinación COVID pese a hacer una mención expresa a ella en las mismas, nos genera cierta preocupación y desde la Federación de Enseñanza de CCOO Andalucía entendemos como esencial el mantenimiento del cupo de las plantillas COVID referidas al curso 2020/21 , porque por más que “el estado de alarma haya concluido y la vacunación marche a buen ritmo” seguimos estando en el mismo escenario de pandemia que en septiembre de 2020 y por lo tanto los centros y sus plantillas necesitarán estos efectivos para poder hacer frente de nuevo al reto de hacer de los centros educativos entornos escolares seguros .

En un escenario de plena presencialidad como al que todos queremos llegar, necesita no solo el mismo cupo que el año anterior, sino posiblemente más efectivos, no podemos ser cicateros en esta cuestión y habrá que abordar el tema con valentía.

“Menos ratio es más”, más seguridad, más calidad, por lo tanto, para que podemos empezar un nuevo curso con las suficientes garantías, tenemos que partir de una oferta generosa de plantilla COVID, una apuesta real por nuestro sistema educativo y por una educación pública de calidad.

Los centros necesitan reforzar las plantillas de profesorado, pero también las plantillas de administración y servicios y hacer un seguimiento exhaustivo para que el protocolo COVID se cumpla de manera real en los comedores y transporte escolar.

En definitiva, desde la Federación de Enseñanza de CCOO Andalucía exigimos a la Consejería de Educación y Deporte que se comprometa con la Educación andaluza y haga una apuesta por un curso escolar seguro que pasa por no recortar los efectivos de la plantilla COVID. Nosotros estaremos vigilantes para que no se oferte ni una plaza menos.